33. Requiem alemán

Como la flor del campo

¿Por qué Dios se da el hombre? El inmenso, poderoso y magnífico Dios, ¿por qué se da al pequeño hombre? ¿Qué es el hombre para que te acuerdes de él?, Dios se da al hombre porque este pequeño ser pierde la cabeza, la calma, el camino, se pierde a sí mismo y va a parar a donde paran todos los restos de las cosas; o, a lo mejor, a donde iría a parar, si no existiese esta intervención de la Gracia. Dios se da a sí mismo al hombre, le da su fuerza para que el hombre no se pierda, para que el hombre pueda realizar el destino para el que Dios mismo le ha creado: un destino de felicidad y justicia, de verdad y amor, que es Su mismo amor. Le ha dado un destino de convivencia con Él, de familiaridad con Él. ¡Qué grande es esto: somos llamados hijos de Dios, pues lo somos realmente! Y esto, que quizá Brahms no llegó a experimentar, es posible en cualquier momento.

Extracto tomado desde el comentario de Luigi Giussani en la Colección Musical Spirto Gentil
Accede al texto completo de sobre esta obra en Scritti Luigi Giussani:
https://www.scritti.luigigiussani.org/es/s/como-la-flor-del-campo-en-requiem-tedesco-de-johannes-brahms-20130116

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